Crítica cinematográfica: La Garra de Hierro (2023)

Una travesía prestigiosa manchada por la tragedia

El deporte es una actividad física competitiva que ha servido de entretenimiento por largo plazo para millones de personas, no obstante, habrá una familia numerosa que generará un impacto en la historia del mismo jamás antes visto... La Garra de Hierro... es la siguiente obra que analizaré... acompáñenme a esta aventura acontecida en la época de los 80s. 

La fecha de ayer pude disfrutar en mi plataforma favorita, debido a que aun no arriba a las carteleras del cine en el país donde resido, la estremecedora película The Iron Claw, titulado en América Latina como La Garra de Hierro, creación dirigida y escrita por el canadiense Sean Durkin, reconocido por realizaciones como Martha Marcy May Marlene (2011) y The Nest (2020). Conforma un conjunto laboral junto a Tessa Ross en la producción, Richard Parry como componedor, Mátyas Erdély su fotógrafo y Matthew Hannam en el montaje.

Este film británico-estadounidense se centra en el linaje Von Erich, oriundos del estado de Texas, apellido renombrado dentro del cuadrilátero desde mediados del siglo XX, década marcada por la popularidad de los eventos deportivos y el auge de la televisión. Fritz (Von Erich), a través de sus distintos descendientes, intentarán dejar en lo más alto posible su nombre, mas, debido a sucesos inexplicables de la ventura, experimentarán duramente los misteriosos caminos de la vida.

Su elenco está integrado por: Zack Efron, Jeremy Allen White, Harris Dickinson, Maura Tierney, Holt McCallany, Lily James, Michael J. Harney, Maxwell Jacob Friedman y demás.

   

La Garra de Hierro es una cinta biográfica distinguida por géneros cinematográficos tan renombrados como el drama y deporte, basada en la infortunada historia real de los Von Erich, que destaca principalmente gracias a su trama conmovedora, actuaciones increíbles del reparto, escenografía alucinante y banda sonora formidable.

Esta andanza inicia con la vivencia de Jack Edkinsson en los años 60s como padre y luchador en un pasatiempo cuesta arriba para sobresalir, dando el máximo para triunfar en el ring con la finalidad de marcar un precedente legendario que le permita proveer educación y bienestar a sus seres queridos. Teniendo altas aspiraciones personales, Fritz será puesto a prueba de tal forma que necesitará surfear las intempestivas olas del trayecto exitoso para ascender profesionalmente - siendo, inclusive, perjudicado en su rol por decisiones ajenas a su voluntad, realidad que no anhelaba para sus retoños en el mañana.

Aun así, siendo una de las características más representativas de las artes escénicas, Jack precisaría de algo propio para calar en el perfomance, y uno de los requisitos para trabajar en ese ámbito era escoger un nombre, y vaya que lo haría, al optar por un pseudónimo unido a la denominación de su abuela, algo que nadie jamás olvidaría a partir de ese momento: Fritz Von Erick, malévolo e imponente alemán (marcando así un antes y después en la memoria del fanático).

Actualmente, teniendo dos hijos y a a la espera de otro por venir, Fritz y su esposa Doris se preocupan sustancialmente en hallar la manera de sostenerse financieramente, comprendiendo que sus ingresos monetarios son todo menos altos. Sin embargo, el talentoso peleador, consciente de la situación hogareña, esta convencido plenamente en que dar grandes esfuerzos no solo los volverá más fuertes, sino que traerá los frutos para prevalecer como justo ha soñado desde hace tiempo: obtener el Campeonato Mundial de Pesos Pesados de NWA.

En un pequeño paréntesis, desde los primeros minutos de este viaje dramático, pude percibir con los distintos ángulos y colores blanco/negro un sentido significativo plasmado de gran modo que indudablemente me impresionó positivamente, recordándome a The Wrestler (2008), Rage Bull (1980) y Cinderella Man (2005), elaboraciones artísticas que marcaron un hito.

Presentemente, habiendo prometido solemnemente obtener una de las preseas más prestigiosas del mundo deportivo, el largilucho Fritz triunfaría como había jurado anteriormente y sentaría un precedente en la Lucha Libre. Asimismo, el clan Von Erick todavía seguiría creciendo con el transcurrir de las primaveras, dando la ligera impresión de que las huellas del padre pudieran ser seguidas por uno de sus sucesores en los años venideros.

Ahora, luego de haber pasado varios abriles conocemos al fornido Kevin Von Erick, uno de los vástagos del inolvidable Fritz, con serias intenciones de perseguir los pasos de su figura paterna -previamente citada- para intentar triunfar a lo grande en la lona. Empero, teniendo un peso enorme bajo sus hombros, al joven Kevin le costaría un poco al principio, como en toda competencia, pero recibiría ayuda de un coach con amplio conocimiento.

La fama del competente Kevin iría tomando auge con el marchar de los días, absorbiendo como una esponja los consejos de su progenitor y progresando en su entrenamiento dentro y fuera de la plataforma, factores que lo llevarían a una oportunidad estelar por el Campeonato Pesado de Texas para probar su valía como combatiente. Después de un empeño considerable e increíble, el fortachón Kevin sería laureado con su primera conquista -hecho que lo catapultará al foco de la cámara.

Ulteriormente al logro individual de Kevin, la atención de Fritz empezaría a enfocarse en sus otros hijos que también residen en casa llamados David y Mike, momentáneamente holgazaneando y sin un objetivo concreto, entrambos serían sermoneados seriamente con el ánimo de generar una concientización profunda sobre sus rumbos. A uno, Mike, le gustaba desde chico la música y tocar instrumentos; el otro, David, ayudaba un poco en los quehaceres del rancho -este último tomaría una decisión interesante.

Cursando la etapa adolescente, un trecho relevante para sentar las bases del porvenir, David se envalentonaría al ser reprendido anticipadamente y por ende cruzaría la vereda para pisar el sendero de la disciplina deportiva (una vez por todas) junto a su hermano mayor Kevin, el cual posee más experiencia en el territorio púgil. Ya habiendo pisado el magno escenario, David comenzaría a generar buenas sensaciones desde su combate inaugural y su bato Fritz contemplaría un diamante en bruto.

Dando el todo por el todo para imponerse como lidiadores en el anillo, ambos amigos de sangre juntarían su brío para salir adelante, experiencia que al principio divertiría pero posteriormente causaría una sana rivalidad. Entonces, Kevin, obtendría una ocasión inmejorable en su carrera frente al público multitudinario de Misuri, al poder medirse ante al implacable Harley Race, Campeón Mundial Peso Pesado de la NWA -resultando en una conclusión indeseable para el contendiente.

En un inesperado acaecimiento que trasciende las fronteras, una medida política del vigente presidente de los Estados Unidos determinaría la exclusión de la selección norteamericana en los Juegos Olímpicos de 1980 (en Moscú), privando a muchos atletas -y con ellos Kerry, otro de los hijos de Fritz Von Erich- por consiguiente el ceso de sus entrenamientos, volviendo la mayoría a sus casas. Actualmente, pasando unos amaneceres junto a su núcleo familiar en la vivienda natal, Kerry recibiría con predisposición un claro mensaje de su padre referente al futuro cercano.

Acá se suscitaría un giro argumental, con la inclusión de David y Kerry a la palestra pública al grupo Von Erich, añadiendo un atractivo al relato desde el punto de vista rivalizante, que más allá de gestar un conflicto entre hermanos, produciría la mejora paulatina como pugilistas al lado de su estimado y exigente manager Fritz. Y a la vez, como si de una maldición se tratase, circunstancias enigmáticas se desarrollarían sin que ninguno lo espere.

Correrían los meses en un santiamén, unos bregándose ante sus colegas de compañía para obtener su preciada recompensa y otro sumando prioridades a su existencia, como el amor en pareja, decidiendo David casarse con su adorada Pam -con quien mantenía una relación de noviazgo durante un lapso prolongado. A excepción de Jack Jr., fallecido a temprana edad, todos los miembros del clan Von Erick habían emprendido vestirse y ponerse las botas de pelea, menos Chris -hasta este instante.

Por añadidura, exceptuando cualquier conjetura relacionada con la polémica y la desazón de diversos admiradores con el trato a los Von Erick dentro del aro, es muy difícil apartar mi atención de la pantalla al distinguir el empeño de cada figura por ser "el más fuerte y lo mejor de lo mejor" continuamente. Kevin, David y Kerry avizorarán en su panorama un arduo destino para aportarle aun más reputación a su alias, seguido por peripecias que hasta el sol de hoy todavía son temas de conversación.  

Vale acotar, que como apasionado del wrestling desde hace un período, conocía parte de la semblanza de los Von Erich, sin intuir del todo como impactaría en mi al contemplar este largometraje fundamentado en sucesos reales de esta índole. El cineasta Sean Durkin brilla notoriamente, al crear un guion técnico excelente y preferir un equipo artístico a la altura del cometido. Richard Parry sobresale como compositor sonoro, aportando epicidad en cada pieza musical. Matthew Hannam predomina en la edición, implementando unas secuencias audiovisuales que aseguran una increíble puesta en el escenario. En la ocupación fotográfica está Mátyás Erdély, cumpliendo con creces la tarea al capturar esa esencia ochentona, por ejemplo, desde los tetrágonos -consiguiendo sublimemente unas ópticas y encuadres formidables.

El desempeño actoral también fue impecable, y uno de ellos quien cumple a cabal ese término es el célebre Zak Efron al interpretar a Kevin Von Erich, sujeto calmado y persistente. Jeremy Allan White se luce como Kerry Von Erich, tipejo recio y hábil. Harris Dickinson sorprende como David Von Erich, un muchacho aguerrido y comprometido. La ilustre Maura Tierney deslumbra al encarnar a Doris Von Erich, una mujer serena y cariñosa. Holt McCallaney fascina al personificar a Fritz Von Erich, hombre pensante y circunspecto. La señorita Lilly James maravilla al representar a Pam Adkisson, dama alegre y dulce.

Seas simpatizante o no de esta clase de películas, la narrativa percibida en sus diferentes actos es apacible aun cuando la temática primordial está trastocada por catástrofes imprevistas que expresan la cruda realidad sufrida por los verdaderos protagonistas. Conjuntamente a esto, manifiesta igualmente la grandeza originada en ocasiones a tal magnitud, que me hizo querer subirme al cuadrado para emular el honor de luchar por los mios. Como si lanzáramos una moneda de dos caras, esta entrega marcará tu destino con episodios eventuales que desencadenarán un impulso irresistible a deleitarte de la victoria.

Tiene una duración de 132 minutos, es clasificación R, fue distribuída por A24, producida por BBC Films, su presupuesto rondó aproximadamente los 20 millones ($). En conclusión, fragmentos de su vista fueron capturados en Baton Rouge, Luisiana y contó con el mexicano Chavo Guerrero Jr. como consultor experto en la materia.

Si gustas mirar este filme, aun no se oficializa su llegada a algunas salas de Sudamérica pero sí está disponible en Amazon Prime Video y prontamente también en el servicio de transmisión Max.

Hasta la próxima, cinéfilos.